Halasana, la postura del arado

Halasana, la postura del arado

Las posturas de inversión suelen considerarse como asanas de nivel intermedio-avanzado. Si bien es cierto que requieren tomar una serie de precauciones, además de la práctica constante, el esfuerzo lo vale por la gran cantidad de beneficios que aportan. Hoy te traemos una compañera frecuente de esta última. Estamos hablando de Halasana, la postura del arado.

Esta asana toma su nombre de una herramienta para cultivar el campo. De la misma manera, al practicar Halasana estamos preparando el terreno para rejuvenecer y revitalizar nuestro cuerpo. Arar la tierra también implica otorgarle cierto orden, lo cual se manifiesta en la naturaleza tranquilizante de esta postura. Una vez dominada, es excelente para calmar los nervios y la ansiedad, lo cual la hace una preparación ideal para la meditación. Es muy beneficioso realizarla cerca del final de una clase de yoga, como antesala a Savasana.

Halasana es excelente para combatir los síntomas de enfermedades asociadas a malos hábitos de la vida cotidiana, como problemas de postura, presión alta, constipación, problemas estomacales, etc.

A largo plazo, la postura del arado te ayudará a no perder vitalidad con el correr de los años. Llegados a cierta edad, empezamos a perder flexibilidad de la espalda, lo cual es el origen de muchos malestares. La práctica habitual de Halasana mantiene la espalda saludable y en movimiento, lo cual se traducirá en una mejor calidad de vida en general.

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La postura del arado también calma y renueva el sistema nervioso. Realizando esta postura con regularidad, notarás mejoras en tu capacidad de concentración y en la memoria. Además alivia otras aflicciones como estrés, fatiga e insomnio.

Ficha técnica

Halasana Paso a Paso

  1. Recuéstese boca arriba. Se recomienda colocar una manta doblada debajo de la espalda alta, de modo que brinde poyo hasta la zona cervical. La cabeza queda apoyada en el mat.
  2. Afirme bien los brazos en el suelo y con una inhalación trate de sentir como el abdomen tiende hacia la columna vertebral, plantando bien la espalda en el piso.
  3. Exhale y lleve las piernas hacia atrás, por sobre su cabeza. Los pies tienden hacia el piso, idealmente llegando a apoyar los dedos. Empuje desde los talones.
  4. Mantenga el torso perpendicular al suelo y las piernas extendidas, tanto como le sea posible.
  5. Hasta este punto, puede haberse ayudado con las manos para sujetar su espalda baja, como lo haría en Salamba Sarvangasana. Puede mantenerse en esa posición o, si se siente seguro, extienda los brazos y entrelace las manos.
  6. Busque apertura en el pecho, baje los hombros y acomódese desde los omóplatos. Asegúrese de no comprimir el mentón contra el esternón. Relaje los músculos del rostro y de la garganta.
  7. Para salir de la postura, puede ayudarse colocando las manos en la espalda baja, o puede plantarlas firmemente a los lados del cuerpo. Siempre asegúrese de bajar las piernas lentamente, sintiendo cómo se va apoyando la espalda vertebra por vertebra.

Es muy habitual que esta asana se realice a partir de Salamba Sarvangasana, la postura de la vela. Simplemente parta de la posición perpendicular al suelo y baje las piernas lentamente hasta tocar el piso. Luego siga las consideraciones detalladas anteriormente.

Beneficios de la Postura del Arado

  • Elonga la espalda, el pecho y la parte posterior de las piernas.
  • Estimula la tiroides.
  • Calma la mente, ayudando a reducir los síntomas del estrés y la fatiga.
  • Efectos terapéuticos para la sinusitis, dolores de cabeza, dolor de espalda e insomnio.

Consejos para principiantes

Si no llega a tocar el suelo con los pies, tiene varias opciones:

  • En primer lugar, puede tratar de llevar las piernas hacia atrás en semiflexión.
  • Otra alternativa es practicar contra una pared, de modo que los pies tengan un punto de apoyo más cercano que el suelo.
  • Por último, puede mantener las piernas en el aire hasta alcanzar la flexibilidad necesaria para llegar a la postura final. En este caso,s e recomienda mantener el apoyo de las manos en la espalda.

Precauciones

  • No realice esta postura si sufre de lesiones en el cuello.
  • Tampoco se recomienda si se encuentra en el período de la menstruación.
  • En caso de estar embarazada, sólo realice Halasana si tiene experiencia previa con la misma. No trate de realizarla por primera vez durante el embarazo.
  • Se recomienda comenzar a practicar Halasana con la guía de un instructor, ya que en su forma final se considera una asana de dificultad intermedia-avanzada.

Variaciones

Una variación de esta postura es Parsva Halasana. Sólo puede realizarla si consigue llegar con los pies al piso realizando Halasana.

Desde la postura del arado, manteniendo el soporte de las manos en la espalda, camine con los pies hacia la izquierda tanto como le sea posible sin causar molestias. Trate de mantener la cadera en una posición neutral, tanto como sea posible. Mantenga la postura durante un par de respiraciones. Luego vuelva a caminar hasta el centro y repita hacia la derecha.

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24 comentarios

  • Me encanto la informacion sobre la postura del harado, una de mis poses favoritas, que cuetsa al principio pero despues se vuelve muy gratificante y placentera.

  • Hola, llevo muchos años practicando yoga y este año en la clase nos han puestos unas mantas para elevar el cuerpo hasta el cuello para hacer la postura del arado o de la vela. En mi caso no acabo de sentirme cómoda con esas mantas pero según me dicen en la clase es para evitar dolencias y creo que lo que se hace es todo lo contrario.

  • Me gusta mucho esta posición, es la única que me ayuda cuando me da lumbago -y así evito de tomar medicamentos-; lo que hago es aguantarme el dolor por un rato para hacer la postura, y mientras practico siento el calor liberado en esa zona que esta contraída, es una medicina súper mágica.

  • Desde hace veinte años practico yoga, y ahora estoy cursando el primer año del instructorado. Este es un asana que disfruto mucho. Gracias por el artículo. Me ayuda en mi formación

  • Hola, tengo casi un a;o de practicar yoga, no lo habia podido practicar por que aqui en mi cuidad eran muy caras la secciones .Por fin encontre un lugar amis posibilidades.El arado es de mis posturas favoritas y me sale muy bien, pero tengo mi cervical recta en vez de tenerla curveada..no se si me recomienden seguirla practicando?

  • Me encanta esta postura! Me ayuda a relajar la espalda. Voy a probar la variación que proponen. Muchas gracias!

  • Recién voy a comenzar, asique me gustaría que me fueran enseñando las posturas y sus nombres para ir practicandolas y anotarlas en un cuadernillo, muchas gracias!!

    • Hola Estela! Tenemos toda una sección de asanas, donde te indicamos paso a paso cómo realizar las posturas, además de consejos y recomendaciones a tener en cuenta. Puedes verla aquí.
      Saludos!

    • A algunas personas les pasa, por cuestiones anatómicas o porque les hace sentir un poco de claustrofobia. Quizás simplemente necesites un poco más de preparación para adquirir más flexibilidad en la espalda. No desesperes, Lorena, irás descubriendo qué funciona para ti 🙂

  • Tengo 4 años practicando yoga y esta postura a pesar de decir ser nivel medio-avanzado a mí no se me complicó mucho, es una de mis posturas favoritas se siente ese tirón al principio pero bastante relajante.

    • Genial, Erika! A veces nuestro cuerpo tiene cierta facilidad natural para algunas asanas.

    • Hola Silvia! Nos alegra que podamos acercarte cada día un poquito más de información. Esperamos que sigas acompañándonos. Saludos!

  • Me encanta esta postura! A veces hago lo de caminar hacia los lados, no sabía que era formalmente una variación. Gracias por compartir.

    • Nos alegra poder ayudarte a descubrir algo nuevo cada semana, Ariana! Gracias por dejarnos tu comentario.

    • Qué bueno, Viviana! Una oportunidad excelente para cuidar la columna. Saludos!

  • Es una posición que me produce mucho placer, me siento muy cómoda al hacerla y puedo sostenerla en el tiempo,

    • Excelente, Viviana! Nada mejor que poder sentirse cómodo y disfrutar a pleno Halasana 🙂

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