Meditación para hacer en luna llena

Cada luna, dependiendo de la fase y signo en que se encuentre, nos “habla” de algo diferente. Es una melodía distinta que “tocan” los astros y que repercute con diversas tonalidades en cada ser humano. Ella nos invita a “afinarnos” y a profundizar en la auto-observación de nuestro mundo emocional y nuestra energía femenina; nos conecta con nuestros ciclos internos, con nuestras intuiciones, con el sentir…

Sintonizarnos con esa melodía y abrirnos a la escucha interna ayudará a despertar lo mejor de nuestro potencial. Conectar y fluir en esa energía que nos provee la naturaleza nos hace sentir que somos parte de un todo.

Cuál es la energía de la Luna llena

La luna llena tiene un poder hipnótico. Cuando está ahí en el horizonte en su máximo esplendor, radiante y brillante con su tono perlado y a veces sumergida en esos colores más purpúreos y rosados, nos genera un efecto sublime, porque en ese instante que nos capta se produce ese efecto meditativo en el que la luna y tú son lo mismo. Es un instante mágico que la naturaleza nos ofrece.

Cada luna llena representa el momento de mayor clímax emocional, su pico más álgido y donde lo que estaba inconsciente está ahí más latente para que podamos verlo. Los ciclos lunares nos ayudan a entrar en eje, siempre y cuando trabajemos y ahondemos en ello, ya que tal conocimiento sin acción es una ilusión.

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Los momentos en que la luna está llena deberíamos estar más cautos, así evitamos conflictos, emociones descontroladas o innecesarias, y comportamientos y reacciones automáticas. Incluso es un momentos en que la mente está muy activa y puede que resulte difícil conciliar el sueño. Por eso una buena práctica de relajación consciente o una meditación puede ayudar a aquietar la actividad mental y descansar mejor.

Particularidades de la luna llena del 19 de abril de 2019

La luna llena del 19 de abril de 2019 es la segunda luna llena en el signo de libra, lo cual parecería querer reforzar algo de lo que se vivió en la anterior.

Libra es un signo de aire. Este elemento simboliza la mente, las ideas, la comunicación. En su simbología está la balanza, lo cual representa que busca encontrar el equilibrio, mediar, negociar, y que estará también vinculado a cuestiones legales. Además, su regente Venus eleva los atributos de la belleza, la diplomacia, la estética y la seducción; comunica con gentileza y armonía. Su escenario clave es la pareja o los socios; pares con los que escoge vincularse con un propósito en “concreto”.

Entonces esta luna nos invita a observar desde qué lugar estamos eligiendo vincularnos con un otro, cuáles son las proyecciones que están más a flor de piel, qué tienen ellas para decirme.

La luna que se forma a los 29 grados de Libra, es decir, ya en su fase de cierre, pareciera decirnos: “¡Alto! Te ha quedado este pendiente…”

Y para darle un poco de condimento tiene algunos aspectos que podrían generar algunas tensiones imprevistas, ya que Urano en Tauro (junto al Sol en Aries) está en oposición a la luna en Libra.

Traduciendo un poco: tanto Tauro como Libra son regidos por Venus que nos conecta con la belleza, el disfrute, el placer. Con Tauro se resalta más la forma en la que nos vinculamos con el disfrute y el valor que tenemos con la materia (cuerpo, casa, dinero, etc) y con Libra, la forma en que disfrutamos y nos expresamos a través de las palabras al vincularnos con un otro.

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En esta lunación ambas energías están tironeadas, parecería ser que algo emerge repentinamente y nos hace perder el control. Urano es una energía que podemos compararla a los momentos en que recibimos una pequeña descarga eléctrica, viene repentinamente sin previo aviso. Entonces es un buen momento para observar si hay algún síntoma físico incómodo, un malentendido, un cambio repentino en la materia, incluso algún inconveniente eléctrico en relación a la casa, el auto, el dinero, el cuerpo, etc. Éstos son indicadores de que hay algo que está queriendo ser profundizado, transformado, liberado, sanado.

No necesariamente tiene que suceder esto en el momento exacto de luna llena; puede ser algunos días previos o posteriores.

Meditar en luna llena

La práctica de la meditación te ayudará a centrarte más, a observar tus emociones y a aquietar tus pensamientos. Practicarla regularmente te permitirá acceder a otro nivel de consciencia, entrar en un contacto más profundo y verdadero con tu verdadera esencia.

Imaginate tener encendida la radio 24 horas; por más de que no la escuches está ahí, generándote una determinada vibración, y cuando la apagas experimentas el silencio, y ese silencio es un elixir (al menos para varios) por que tu mente está activa incluso cuando duermes.

Por eso la práctica de meditación y de relación son bien importantes en tu vida diaria, sobre todo para las personas que viven en la ciudad, donde la estimulación es constante. Aquí hay que recordar, incluso, las ondas electromagnéticas que invisiblemente juegan un papel muy nocivo en la salud.

Meditación paso a paso

Para sintonizar con la energía disponible durante esta luna llena podrías compartir la práctica de meditación con alguien más, puede ser tu pareja o bien otra persona. En caso de que no puedas hacerlo con alguien más, usa un espejo frente a ti.

Consejos previos a la práctica de meditación en luna llena:

• Usa una luz levemente tenue para generar un mejor clima.
• Utiliza velas y algún aroma suave que sea de tu agrado.
• Puedes utilizar alarmas programadas con sonido de campanas o un sonido acorde, con un volumen bajo.
• Recuerda apagar los teléfonos, para estar tranquilo/s al menos 50 minutos aprox. (Si has programado alarmas, pon el móvil en modo avión).

Pasos

Siéntate frente a frente con tu compañero o compañera (o el espejo). Inhala y exhala por nariz unos minutos con párpados cerrados.

Haz de 5 a 10 respiraciones profundas, llevando el aire hacia la parte baja de tu abdomen y exhalando largo, sin apuros (inhalando y exhalando por nariz). Así empiezas a habitar conscientemente tu cuerpo.

Abre tus párpados y observa a quien está en frente tuyo. Quédate ahí mirando a los ojos a esa persona. Si aparece alguna incomodidad sólo observa, deja que pase, quédate en quietud. Procura que tu rostro esté totalmente relajado. Mantén esto unos 15 minutos, luego cierra tus párpados y quédate en silencio otros 15 minutos más.

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Pon el foco en observar tus sensaciones (frío, calor, liviandad, pesadez, qué partes del cuerpo sientes con mayor precisión, si sientes alguno de tus plexos más presentes). Cuando la mente pierda el foco, no juzgues ni alimentes los pensamientos; vuelve al cuerpo, registra.

Luego abre tus párpados. Quédate frente a frente en silencio solo unas 3 respiraciones más y agradécele a tu compañero o compañera y a tí mismo por darte el permiso para brindarte esta oportunidad y espacio de práctica.

Sugiero para finalizar y si lo deseas escribir lo que has sentido, o algo que te apareció. También sugiero que no compartas tu experiencia en ese momento, al menos que te sientas muy alineado y creas que es un aporte amoroso hacia el otro, sino es mejor quedarse en silencio interno y registrar todo lo que se ha movilizado.

Om shanti
Namasté